El cónsul general de la República Dominicana en Miami, Jacobo Fernández, designado por el presidente Luis Abinader en agosto pasado, declaró un patrimonio ascendente a RD$31.6 millones en su declaración jurada de bienes depositada en la Cámara de Cuentas.
El ingeniero reportó dos propiedades residenciales, una valorada en RD$6,314,000 y otra por RD$9,962,947.44.
También, consignó bienes que tiene junto a su esposa, en los que se refleja un carro Mercedes Benz del 2008 por un valor de RD$526,000, una cuenta de ahorros por RD$1,664,854.40 y dos certificados de inversión a plazo fijo, uno por US$41,272.66 y otro por RD$500,000.
Asimismo, un ingreso por salario de RD$2,600,000 que reciben ambos de la O&MED.
En la declaración de patrimonio el diplomático también reportó electrodomésticos valorados en RD$200,000, herramientas y maquinarias por RD$350,000, equipos de cómputos y de comunicación que ascienden a RD$235,000 y una yipeta Nissa Patrol 2014 por valor de RD$1,616,000.
Igualmente, declaró tres cuentas de ahorro, una en dólares por US$27,106.80, una en euros por €$2,621.10 y una en pesos por RD$3,324,744.31.
Finalmente, por concepto de salario mensual, consignó US$2,500 por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Fernández trabajó desde 2017 y hasta la fecha de su designación en el Consulado, como director de proyectos en la Universidad O&M, propiedad de la familia del presidente Luis Abinader.
Además, es de los fundadores del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y dirigió el movimiento Construir-2020, con el apoyo de representantes de la sociedad civil, arquitectos empresarios y trabajadores de la construcción.