Airbnb y la ciudad de Nueva York resolverán su lucha por una ley que buscaba limitar los aumentos de alquiler de viviendas, al exigir que las plataformas de renta a corto plazo compartan información sobre sus listados, anunciaron las dos partes el viernes.
Según el acuerdo, Airbnb, con sede en San Francisco (California), desestimará su demanda federal contra la ciudad. A cambio, el Concejo Municipal de NYC enmendará una ley de 2018 que requería que las plataformas de uso compartido del hogar brinden datos detallados en todos sus listados.
Conforme a la ley enmendada, las compañías que comparten el hogar aún deberán proporcionar información que incluya direcciones y nombres de anfitriones, pero la ley se aplicará sólo a los listados que ofrecen un hogar completo o que permiten que tres o más invitados se queden al mismo tiempo.
Los datos deberán proporcionarse trimestralmente, no mensualmente, como lo exigía originalmente la normativa local.
La ley tiene la intención de tomar medidas enérgicas contra las personas que usan Airbnb para administrar hoteles improvisados. Los críticos dicen que estos alquileres informales aumentan los precios de vivienda para los neoyorquinos, al disminuir las propiedades disponibles.
“Los operadores de hoteles ilegales que violan la ley a expensas de los neoyorquinos que trabajan no tienen lugar en nuestros vecindarios”, dijo el alcalde Bill de Blasio en un comunicado. “Finalmente, tendremos la información crítica que necesitamos para preservar viviendas asequibles y mantener nuestras comunidades protegidas”.
El portavoz de Airbnb, Christopher Lehane, dijo: “Hace mucho que queríamos trabajar con la ciudad de Nueva York en un marco regulatorio efectivo, que incluya el intercambio de información; este acuerdo lo logra”.